La iglesia es una de las realizaciones más altas y más originales del edificio religioso barroco en Lucca, un unicum para la solución de la fachada, colocada angularmente, y de la estructura, establecida en un plano oval. Fue construido, modificando radicalmente una construcción anterior, entre 1738 y 1748, por Francesco Pini. Los diseños para la magnífica decoración interior son quizás de Silvestro Giannotti. Las dos estatuas que representan a la Caridad y la Pureza deben ser remitidas a Giovanni Lazzoni y Giovanni Antonio Cybei, mientras que las pinturas murales y la decoración ilusionista de la cúpula son de Bartolomeo de Santi. Se colocó un gran lienzo oval en el altar mayor con El éxtasis de Santa Catalina por Pompeo Batoni, que ahora se conserva en el Museo del Palazzo Mansi.
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