Viaja por una de las carreteras más panorámicas de la Toscana, recorriendo el característico paisaje lunar de las Crete Senesi de camino a la aldea medieval de Pienza, en el valle de Val D'Orcia. Pienza, una de las primeras ciudades planificadas íntegramente sobre papel por importantes arquitectos y artistas de la época, recibió el encargo del papa Pío II -el papa humanista- de ayudarle a renovar su ciudad natal y llevarla a un nuevo esplendor. Un almuerzo saludable, a base de ingredientes locales frescos, te estará esperando en una hermosa terraza (si el tiempo lo permite) en una granja lechera local. Conoce el proceso de elaboración del famoso queso pecorino italiano. Continúa por la tarde hacia Montepulciano, una de las mayores ciudades de montaña de la Toscana. Bajo el dominio de Siena en la Edad Media, y de Florencia durante el Renacimiento, hoy es famosa por su vino. Observa influencias de ambas ciudades en la arquitectura y el arte del centro histórico, situado en una empinada colina con hermosas vistas de la frontera entre la Toscana y Umbría. Dirígete a la Piazza Grande principal, y visita una de las muchas bodegas, excavadas en la tierra bajo la ciudad. Descubre algunos de los palacios de las familias nobles que vivieron aquí. Tras un breve paseo por la ciudad con un guía, disfruta de tiempo libre para degustar los vinos de fábula, o sigue explorando los palacios, iglesias y calles por tu cuenta. Mientras sigues el trazado de la carretera principal cuesta abajo, imagina lo duro que debe ser el festival "Bravio delle Botti", ¡una competición de carreras de barriles de vino desde la base hasta la cima de la colina!