Descubre el esplendor de Rávena con una visita guiada y sumérgete en su rica historia. Disfruta de acceso prioritario a 4 monumentos patrimoniales locales y explora junto a un experto. Experimenta lo mejor de la ciudad en un solo día con esta emocionante aventura. Comenzando en el punto de encuentro cómodo en la Plaza de San Francisco, recorre las calles del centro de la ciudad con tu guía para conocer cuatro increíbles lugares declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO: la impresionante Basílica de Sant'Apollinare Nuovo, el Mausoleo de Galla Placidia, la Basílica de San Vitale y el Baptisterio Neoniano. Tendrás la oportunidad de visitar: La Basílica de Sant'Apollinare Nuovo: originalmente la iglesia palaciega del Arrianismo, que hoy en día nos permite reconstruir la evolución de los mosaicos murales bizantinos desde la época de Teodorico hasta la de Justiniano. La Basílica de San Vitale: uno de los monumentos más importantes del arte paleocristiano en Italia. Al entrar en la basílica, tu mirada se queda cautivada por los altos espacios, las maravillosas decoraciones de mosaico del ábside y la extraordinaria representación de la pareja imperial de Bizancio: Justiniano y Teodora, con su procesión. El Mausoleo de Galla Placidia: construido en el siglo V por orden de Galla Placidia, quien gobernó el Imperio Romano de Occidente. Las estrellas de la cúpula han golpeado la imaginación y la sensibilidad de los visitantes a lo largo de los siglos, y de personalidades destacadas como el gran poeta Dante Alighieri, que se inspiró en ellas para escribir algunos versos de la Divina Comedia. El Baptisterio Neoniano: uno de los monumentos más antiguos de la ciudad, hecho de simple ladrillo en el exterior pero rico en mármol, estuco y mosaicos de clara influencia helenístico-romana en el interior. Al final del recorrido, el guía te acompañará hasta la entrada del Museo Arzobispal, para que puedas visitarlo de forma independiente, según tus intereses y tu tiempo. En su interior, además de numerosos hallazgos arqueológicos y obras de arte, se conserva la Capilla de San Andrés, que con su representación de la glorificación de Cristo es el único ejemplo de capilla arzobispal paleocristiana que se conserva intacta hasta nuestros días.