Al llegar, disfruta de una acogedora bienvenida con un brindis especial junto al personal de la bodega, saboreando un delicioso vino blanco de inicio. Luego, sigue al experto sumiller a 11 metros bajo tierra, donde te llevará a través de un emocionante recorrido por la bodega. Aprende a combinar perfectamente el vino con la comida, descubriendo los secretos de esta unión perfecta. Durante el recorrido, desde la vista aérea hasta el nivel del suelo, conocerás la fascinante historia de la bodega y los procesos de producción del vino. FINALIZA tu experiencia con un deleite para el paladar: una cata de vino de cuatro o siete copas. Para acompañar este placer, disfruta de un almuerzo ligero, que incluye un surtido de quesos, marinados selectos, cerdo negro Nebrodi y un dulce cannolo de ricotta como broche de oro.