Sube al autobús de enlace y dirígete al paisaje lunar de uno de los volcanes más activos del mundo, el monte Etna. Esta magnífica montaña, de unos 1.981 metros, domina la costa y esconde numerosos tesoros. Un viaje a Sicilia no está completo sin visitar los tempestuosos territorios del monte Etna. Comienza en Rifugio Sapienza y sigue la línea de los viejos cráteres Silvestri hacia la cueva de lava formada durante la erupción de 1792. Desde aquí te dirigirás a una granja orgánica local y probarás el vino y la miel que se cultivan en los fértiles suelos de la región. De camino a Taormina, contempla la espectacular reserva de fauna de Isola Bella desde lo alto. Al llegar, almuerza por tu cuenta y, a continuación, reúnete con tu grupo para conocer los aspectos más destacados de esta singular ciudad histórica. Desde el encanto del antiguo teatro griego hasta las impresionantes vistas de la bahía de Giardini Naxos y la sorprendente arquitectura del Palazzo Corvaja, esta ciudad roba el corazón a todos los visitantes.